Bienestar Universal
A través de las prácticas espirituales, creas una profunda conexión con toda la creación y cuando alguien sufre entiendes que la familia universal es UNA. Y así, porque hay muchos necesitados, sabes que debes servir, y sabes que ese es tu deber y vocación.
En la Fundación PanaceAM lo hemos hecho, y la experiencia ha sido valiosa porque nos ha enseñado a servir, pero servir ‘selectivamente’. Hemos aprendido que nuestras energías son limitadas y que deben seguir el principio de la máxima utilización, es decir, sirviendo a quienes realmente lo necesitan y se esfuerzan por superar ese momento adverso sin aprovecharse de su condición de pobres para engañar a los demás, ni de los esfuerzos de aquellos que quieren ayudarlos.
Además, la pobreza es solo la última parte de un círculo vicioso y sin fin y, si las condiciones no cambian, habrá siempre pobres y necesitados. El reto verdadero entonces es romper ese círculo vicioso, cambiar la forma en que funciona el mundo y el sistema perverso que crea los pobres y los incultos, para construir un mundo donde todos puedan desarrollarse en la manera mejor. Porque la codicia humana es infinita, el reto verdadero será entonces luchar por un mundo justo, donde todos tengan los mismos derechos y oportunidades.
El reto verdadero será también ir un paso más allá, y ampliar el radio de tu amor, primero ampliándolo más allá de la pequeña familia formada por padres, hermanos, pareja e hijos, y abarcar a todos los humanos. Y después, ampliar aún más ese radio e incluir en tu cariño y cuidado también al reino animal, las plantas, y a toda la creación.
PanaceAM y sus Movimientos tienen ese bienestar como punto de enfoque y el objetivo de crear ese mundo ideal. Las etapas son despertar a la gente, elevar su conciencia, cambiar sus percepciones y luego actuar para crear un cambio para una sociedad libre de injusticias, sufrimiento y explotación.